No tengo la Verdad absoluta. Nunca tendré la tremenda suerte de poseerla. ¿Por qué se nos hace tan difícil cambiar? Y es que esta es una pregunta que ha rondado en mi cabeza en muchas ocasiones. Dándome cuenta que la denominada zona de confort tiene un papel importante aquí. Ya que esta nos mantiene enraizados en la comodidad más absoluta. En ese lugar donde no vale la pena cuestionarse ( o eso creemos). En ese mismo sitio donde seguimos dando un poder casi absoluto a nuestro ego. Donde el Ser va perdiendo cada vez mas su valía. La zona de confort se convierte entonces en un lugar muy pero que muy peligroso para nuestro desarrollo interno. Dificultándonos el hecho de realizar diversas acciones que agradeceremos en un futuro. Sólo cuando nuestro sufrimiento es mayor que nuestro miedo al cambio lo llegaremos a emprender. Pudiéndose ver esto en repetidas ocasiones en la actualidad. Cuando llegamos a un determinado tope somos capaces de hacer lo que se para cambiar la situación. Todo esto debido a que alcanzamos una saturación proveniente de nuestra parte egoica y nuestra identificación con todos esos pensamientos que puedan llegar a pasarnos por nuestra mente. Por eso se ha convertido en una necesidad el hecho de cambiar de patrones. Pudiendo así adquirir una paz inmensa procedente del gozo del Ser.
Tu blog de psicología, filosofía y espiritualidad.Tu blog de vida. Un placer, Agustín Narváez ;)
¿Por qué es difícil el cambio?
El fracaso
No tengo la verdad absoluta. Nuestro ego odia esta palabra. Y es que si por él fuera, sólo se llenaría de éxitos y más éxitos. Eludiendo que en nuestra vida habrá multitud de ocasiones en las que vamos a errar de lo lindo. No nos llegamos a dar cuenta de la parte increíble que se esconde detrás de cada error y esta es la del aprendizaje. Un aprendizaje encarnado desde nuestra verdadera Esencia, en la que aceptamos el hecho de habernos equivocado en un determinado momento y que por tanto no nos aterrorizamos ante el error. Entendemos de éste que es otro proceso más y que por tanto tenemos que abrirnos ante él con absoluta humildad. No creyéndonos superiores y sin tener una actitud de absoluta arrogancia habremos dado un gran paso en la senda espiritual. Una senda donde comprendemos que errar es una pequeña parte donde la más grande se la lleva el puro aprendizaje. Un paso que marcará toda la diferencia ante todo lo nos hemos llegado a acostumbrar. Así que nuestro fin ultimo es comprender que aunque fracasemos en nuestra vida alguna vez que otra podremos seguir estando felices o por lo menos con un nivel más o menos óptimo de bienestar.
El autoengaño
No tengo la verdad absoluta. Vivimos anclados en una mentira constante. Esto es así debido al sistema de creencias con el que hemos crecido desde que éramos pequeños. Un sistema de creencias que en vez de ayudarnos a ser felices lo único que ha conseguido es perpetuar un poco más nuestro sufrimiento manteniéndonos en un nivel de muy baja consciencia. Viviendo sumergidos en una realidad la cual está bastante más cercana a un nivel de desasosiego casi constante. Por eso es tan importante despertar de la mátrix y quitarnos la venda del engaño de los ojos. Aquí es donde sucedería lo más revolucionario. Un conexión con nuestra verdadera Esencia. Se cae por fin esa máscara egoica que hemos ido alimentando al cabo del tiempo y que tanto sufrimiento es capaz de acarrearnos en estos instantes. Un caparazón que en resumidas cuentas nos ha hecho más mal que bien para nuestra salud emocional. Produciendo muchos quebraderos de cabeza. También impidiéndonos fluir de la manera correcta. Ya que vivimos de manera constante oponiéndonos a lo que ya es. Esto puede dificultarnos encaminar nuestra senda espiritual de manera satisfactoria. Convirtiéndonos así en grandes proclives de experimentar sensaciones de una baja vibración. Sensaciones más propias de la reactividad que de la proactividad. Sensaciones más propias del desconocimiento de uno mismo que del autoconocimiento.
El miedo y la necesidad de abrazarlo
No tengo la verdad absoluta. Vivimos en una sociedad que está acostumbrada a condenar el miedo con fuerte vehemencia. Esto hace que el mero hecho de experimentarlo en algunas ocasiones pueda llegar a convertirse en un fuerte obstáculo para nuestro bienestar interno. Y es llegados a este punto, cuando somos capaces de fustigarnos por experimentar esta emoción. Primero tenemos que llegar a comprender que el miedo es una emoción completamente adaptativa que incluso nos podrá ayudar en esas situaciones de supervivencia. Tenemos que llegar a cambiar el prisma desde el que miramos este constructo dándonos cuenta que no hay nada malo en sentirlo. Cuando experimentamos esta sensación por algunas partes de nuestro cuerpo es ocasión de sacar a relucir toda nuestra valentía para poder superarlo. Por eso, a partir de ahora estimado lector, me gustaría que abrazaras el miedo con la mayor fuerza posible y que sepas que experimentarlo es lo que te hace humano. Sino seríamos robots sin sentimientos ni emociones que nos mantendría completamente indiferentes respecto a todo lo que nos rodea. Esto obviamente no es lo que quieres. Obvio que te gustaría enfrentarte a todas las situaciones que te presenta la vida con una completa seguridad en ti mismo, pero esto no siempre va a suceder. Habrá determinados hechos que nos hagan dudar de nosotros mismos y nos hará estar bastante inseguros de cómo actuar ante todos ellos. Concluyo estos renglones comentando que el miedo tiene una principal misión: poder superarte un poco más, ganándole la batalla al ego y enraizándote con el Ser.
El cuerpo- dolor... Algo que da que hablar
No tengo la verdad absoluta. Si algo descubrí al meterme de lleno en el mundo de la espiritualidad es este término. Algo que me costó entender profundamente en un principio, ya que fue entendido en un principio desde el intelecto en vez del corazón. Nunca podremos entender todos estos conceptos si nos quedamos encajados en nuestra mente. Y es que, los cuerpo dolor estimado lector, no son más que entes alimentadas por nuestro ego ( el ego y el cuerpo dolor están unidos de principio a fin) en el que sometidos por un gran nivel de inconsciencia somos capaces de reaccionar ante los hechos que nos vayan ocurriendo en nuestra vida con una vehemencia impresionante. Los cuerpo-dolor pueden permanecer activos durante la mayor parte del tiempo, o en cambio podemos encontrar otros muchos cuerpo-dolor cuya activación es intermitente. Aquí entran en juego diversos factores que nos mostrarán como son los cuerpo-dolor de los individuos. La cultura y el sitio de donde venga la persona juegan un papel clave en este hecho. Porque hay cuerpos-dolor colectivos bastantes densos que se muestran de esta forma debido a los grandes actos de inconsciencia a los que pueden llegar a estar inmiscuidos los diferentes individuos. Los cuerpo-dolor se van alimentando unos de otros. Necesitan el ente del de al lado para poder mantenerse vivo, se podría decir. Buscando los correspondientes momentos de tensión para poder decir en un momento determinado "aquí estoy yo".
¿Quién soy?
SERVICIOS DE COACHING EMOCIONAL: TITULADO POR LA UNIVERSIDAD ANTONIO DE NEBRIJA. Me presento, soy un chico con 23 primaveras a sus espal...

-
No tengo la verdad absoluta. Anthony de Mello, sacerdote jesuita y psicoterapeuta indio ya usaba este término. El concepto de bastantidad n...
-
No tengo la Verdad absoluta. El ser humano está lleno de numerosos miedos. Muchos de ellos son completamente irracionales. Hay algunos que ...