No tengo la Verdad absoluta. Algo que nos encanta hacer es sentir pena de nosotros mismos. El clásico "todo a mí". Buscando culpables fuera. Ya sea circunstancias de la vida, personas, nuestro pasado... Operar desde esta condición sólo perjudica la actitud que llevamos. Clave para poder enfrentarse a los distintos acontecimientos que se nos presentan. Y es que pasamos gran parte de nuestra existencia reaccionando, en vez de entrar en proactividad. Luego nos sumergimos en la queja constante, alimentando cada vez más la inmadurez. Ser "víctimas" nos desempodera cada vez más. "La causa de mi infelicidad está externamente". Haciendo que nuestro músculo emocional se atrofie. Acompañado todo esto de un espiral de energía negativa. Tú y solamente tú, eres responsable de tu estado anímico. Si no construyes un buen prisma desde donde ver las cosas, créeme que tu victimización nunca cambiará. Infundando la creencia de que eres débil y que no puedes hacer absolutamente nada. En resumen, pasa de ser una "víctima" más a ser alguien totalmente "responsable".
